Mamá me decía, cuando pequeño, que yo era alguien muy especial:
"Has nacido en un medio día de febrero cuando el sol estaba en lo más alto, eres acuario. Ni bien saliste de mí abriste los ojos y te quedaste mirando fijamente todo lo que te rodeaba, como si quisieras conocer el mundo desde ya".
Yo me sentía entonces sumamente especial, distinto.
"Si miras fijamente al cielo durante unos cinco minutos, harás llover".
Nunca intenté mirar tanto tiempo fijamente el cielo, porque de pequeño nunca necesité probarme que de verdad era especial.
Ahora que ya estoy mayor; ahora que mis ojos se niegan a ver más allá de las cosas; ahora que todo es un constante sentirse común, tampoco he intentado mirar tanto tiempo fijamente el cielo.
Ya no tengo la certeza de ser alguien especial, es más lo que tengo, a veces, se parece más a la certeza de lo contrario; sin embargo, ese pequeño espacio de duda está en las palabras de mamá.
Esa pequeña ventana por donde entra la luz, está en la posibilidad nunca desmentida de que puedo hacer llover.
12 comentarios:
Uno de mis juegos favoritos de la infancia siempre fué, mirar fijamente a las personas que estuvieran de espaldas, lo suficiente para hacerlas voltear, y eso si que me hacia sentir especial, por lo demás hace bastante no lo intento, hoy saldré a recuperar mi don.
sabes me pongo muy sencible en esta fecha, ahora que soy mamá veo todo de otra manera, me pongo a pensar de lo importante que es ser Madre, puede ser que me equivoque, la verdad no lo sé... siento que en mi recae la responsabilidad de que Romina sea una buena hija, una excelente profesional, pero lo que si sé es que voy a procurar darle mi poco tiempo y quererla aún más. Para las madres nuestros hijos son únicos y especiales, y sabes algo tú eres especial, lo eres para Romina, lo eres para mí...
Gracias Ross, sabes bien que Romina y tú son parte de la cara luminosa de mi luna; sabes bien que, pese a que casi nunca se los digo, son el aire que respiro.
Y Romina... Romina se ha convertido en la dueña absoluta de mi presente y de mi futuro.
Respecto al primer comment: en algún momento de mi pasado quise aprender a hipnotizar. Me conseguí un libro bastante grueso que, en teoría, me iba a brindar tal habilidad.
Recuerdo bien que en el primer capítulo había un ejercicio que consistía en mirar fijamente, durante cinco minutos el primer día, 10 el segundo, y así sucesivamente hasta llegar a la media hora diaria, durante un mes, la luz de una vela.
Tal ejercicio supuestamente era para "fortalecer la mirada", y ponían como ejemplo el hecho de que la gente a la que uno se quedaba mirando fijamente, en un momento determinado volteaba como si la hubieras llamado.
Como imaginarán nunca pasé de ese primer ejercicio, pero sí comprobé que también podía hacer que la gente busque mi mirada al mirarla fijamente.
Mi querido Hugo.. vaya que sí eres especial para los tuyos.. Cuanto sentimiento en esas palabras. En realidad, debes sentirte muy afortunado. Ayer intenté escribir, pero tan hermosos comentarios llenos de sentimientos tan bonitos me hizo aguardar en mi intento y preferí contemplar la belleza de las palabras. Hermosa familia.. Te felicito.
Y pues, cuando leí tu mensaje, me transportaste a una juventud no muy lejana aún (tienes esa habilidad), y cambiaste mi esquema. Hasta antes de leerte, siempre había pensado que era yo la que tenía la fuerza sobrenatural y más allá de lo evidente, para voltear precisamente hacia el lugar en que se hallaba alguien, en ese preciso instante, observándome. Y cuando veia sonrojar a esa persona, me decía a mí misma: Victoria! Y reia traviesa y sutilmente, sintiendo el sometimiento de la mirada de aquella persona hacia la mía, pues clavaba fijamente estos ojos marrones caramelo sobre quien osaba mirarme hasta que ceda y la retire de mi vista, adoptando sin mala intención una actitud semi soberbia y pícara. Pero no me había puesto a pensar que no era yo la vencedora, sino la que, sin saberlo, quedaba sometida al poder de una mirada que, al entrar en sintonia con mi energía, se dejaba visualizar para mí.. Uhmm vaya punto de vista.. Aun no he tenido la oportunidad de ser mamá, pero espero serlo algún día. Y sí, debe ser una responsabilidad asumida, pero también sé que tendrá el poder suficiente para saber que en todo momento, junto a ese ser maravilloso que ansío llegue pronto, estaré. Lo que sí sé es que cuando llegue será el ser más especial que dará de tirones el corazón de su padre y el mío.. y nos hará dichosos.. Mientras tanto.. seguiré aguardando por esa dicha. MaJosé.
Hola Hugo. Recién hoy conozco tu blog. Una pregunta.
¿Qué esperás para empezar a mirar fijo al cielo?!.
Te dejo un abrazo.
Que el cielo esté recontra cargado, así me aseguro.
que este "recontra cargado" ese esperar me parece una certeza.
Estoy por aca leyendote-descubriendote.
Saludos!!!
Esperar algo a sabiendas que ha de darse: qué buena perspectiva.
Saludos "mi otro yo"
Somos afortunados quienes tenemos o tuvimos una madre que nos amara, y que de una u otra manera nos hiciera sentir que somos seres únicos y especiales. Cuando somos padres, varias piezas del rompe cabezas encajan, y para muchos ... comienza la vida misma.
Qué bonita historia y cuanta magia en las palabras de tu madre.
Gracias por compartirlo.
Te sigo leyendo :)
Reconozco que muchas veces me he sentido especial, qué será, la familia, amigos, no lo sé. Siempre me he esforzado por pisar tierra y tal vez minimizarme, pero en mis pensamientos, se que están todas esas frases que desde mi niñez escuché y que hicieron que me sintiese diferente, y sí, especial.
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